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27 jul 2010

Capítulo 5 de Indecisión

—Pero Cam, lo que él te esta ofreciendo es increíble, nunca creí que un hombre hiciera algo así.

Cam sintiéndose como se sentía estaba en la casa de Melissa, buscando un poco de consuelo, aunque por sus palabras no lo encontraba.

—¿Es que nadie puede entender lo que siento?—exclamó.

—Claro que si, obviamente tampoco va a ser fácil para ti darle una oportunidad o como lo quieras llamar a Axel, creo que aunque tengas permiso, te sentirás culpable, pero creo que si lo haces sin buscar que pase nada eso podría ayudarte.

—¿Qué quieres decir?

—Me refiero a que mientras Nico no esté puedes pasar tiempo con Axel, no buscando que pase algo, sólo como amigos y si las cosas se dan, pues se dieron y ya, vez a donde te lleva, pasando tiempo con él y viviendo lo que sea que se de entre ustedes, tienes que descubrir que es exactamente lo que sientes por él, compararlo con lo que sientes por Nico, y tomar tu decisión.

—Suena tan fácil—susurró Cam pasándose las manos por el cabello—pero no lo es, haga lo que haga, decida lo que decida alguien va a terminar lastimado, no quiero lastimar a ninguno.

—Te entiendo—dijo Melissa—pero podrías hablarlo con Axel, poner las cartas sobre la mesa y que él decida si quiere intentarlo a sabiendas de que podría salir lastimado, seria su decisión y en cuanto a Nico, él sabe los riesgos que corre al permitirte hacer esto, así que si ambos están conscientes del asunto no tienes porque cargar con la culpa por lastimar a alguno de ellos.

—Puesto de esa manera parece lógico, pero no puedo evitar sentirme compartida, arrojada a brazos de otro, no puedo entender que Nico me pida esto…

—¿Y que quieres entonces?—la interrumpió Melisssa—quieres que todo siga como si no sintieras algo por Axel, no es justo para tu novio Cam, entiendo su posición, y siendo otro quizás te hubiera dejado por tu confusión en cambio de da la oportunidad de que definas lo que sientes.

—Entiendo todo eso, pero no que no puedo entender es ¿cómo puedo hacerlo? Yo no podría, no soportaría que él esta con otra persona, por eso no puedo entender que él lo permita, aunque se que me ama haciendo esto me hace sentir como si me amara, aunque sé que es una tontería.

—Pues eso es, una tontería, tu novio te ama demasiado, eso se nota, y creo que es muy maduro y es por eso que ve las cosas desde esa perspectiva…

—¡Melissa! Ya son las 10 de la noche no son horas de visita, ¿a qué hora se piensa ir tu amiguita?

Melissa perdió el color de la cara y miro a Cam, totalmente avergonzada susurró: —Lo siento—y en voz alta dijo: —Entiendo que es tarde padre, sólo unos minutos, perdona.

—Cinco minutos—gritó su padre.

—Lo siento—repitió Melissa al oír las pisadas de su papá alejándose—mi padre es un poco autoritario, no le gusta que me visiten, es muy reservado—agachó la cabeza y Cam notó la tensión que emanaba de ella.

—Lo siento—dijo Cam rápidamente—es tarde y no debí haber venido de improviso, tendría que haberte llamado y preguntar pero dada la situación no lo pensé, en verdad lo lamento, me voy y mañana hablamos en la universidad—comenzó a levantarse pero Melissa la agarró del brazo.

—Espera, no es tu culpa, no te sientas mal, me necesitabas y eso es todo lo que importa, ¿esta bien?—Cam asintió, no quería empeorar la situación. —Mira como veras no puedo llevarte a tu casa, pero no me voy a quedar tranquila si te vas en un taxi, ¿por qué no llamas a Nico? pídele que venga por ti, hablen, mañana se va, disfruta tu último día con él, no dejes que se vaya mientras están molestos.

Cam se lo pensó, ella tampoco quería que Nico se fuera estando molesta con él. —Esta bien, pero no se en donde este en este momento, seguramente se va a tardar más de cinco minutos, pero puedo esperarlo afuera…

—No, de ninguna manera, mi papá va a comprenderlo, no te preocupes.

A Cam no la convenció el argumento, pero sabía que llevarle la contra la haría sentir peor.

Apresuradamente sacó su celular y le marcó a Nico.

—Cam—dijo Nico al responder.

—Hola—susurró Cam—¿puedes venir por mi?

—Claro—respondió Nico—¿Dónde estás?

Después de darle la dirección Cam colgó, en ese momento se escuchó una discusión, tendrían que ser los papas de Melissa.

Las dos permanecieron en silencio, Cam apenada por provocar toda esta situación en la casa de Melissa, y ella avergonzada por su situación.

Diez minutos después Cam recibió un mensaje de texto donde Nico le decía que ya estaba afuera.

Melissa la acompañó a la puerta, Cam le dio un abrazo de despedida y volvió a pedirle disculpas.

Mientras caminaba hacia el coche se lamento en haberle ocasionado tal situación a su amiga, seguramente ahora que se había ido su padre la regañaría, quería hacer algo para impedir que eso pasara, pero no podía hacer nada y por eso se sintió frustrada.

Llegando al coche se subió, Nico miraba hacia el frente y al oír la puerta cerrándose iba a arrancar, pero Cam susurró: —Espera por favor—él se detuvo pero siguió sin mirarla, ella respiró profundamente y dijo: —Siento haberme ido así y quiero decirte muchas cosas pero antes necesito pedirte un favor—eso captó la atención de Nico y él la miró, alzó la ceja y Cam sabía que le estaba preguntando en silencio cuál era ese favor. —Puedes decirme que escuchas en la casa de Melissa.

Nico entrecerró los ojos y tras unos segundos asintió. Cam lo notó atento así que se mantuvo en silencio. Ella trato de ver alguna reacción en su cara para averiguar que estaba escuchando, pero su expresión estaba en blanco. Tras unos minutos lo observo apretar el volante hasta que sus nudillos estuvieron blancos, Cam no soportaba la incertidumbre pero sabía que Nico hablaría cuando fuera necesario.

—Ese tipo es un bastardo, no entiendo como puede haber padres así—finalmente dijo.

—¿Qué paso? ¿Le hizo algo?—preguntó Cam muy preocupada.

—Le dijo cosas muy hirientes, poco falto para que le pegara, ese hombre se comporta como un loco, le dijo que no quería que te volvieras a aparecer por su casa.

—Dios mío—dijo Cam—yo no sabía que Melissa tuviera un padre así, si lo hubiera sabido no habría venido, soy una estúpida.

Nico tomó su mano y la acarició. —No digas eso, tú no sabías y no tienes la culpa de que ese tipo sea así.

Cam se sintió bien teniendo a Nico acariciando su mano, quería que la abrazara, lo quería tanto. —Ella siempre es muy reservada con las cosas de su familia, lo único que sabía es que tiene que irse de la universidad a su casa, pero no pensé que las cosas fueran tan serias. ¿Escuchaste algo en especial que te hiciera apretar el volante?

Nico apartó la mirada, acto que Cam no se perdió.

—Sólo me molesto lo que escuché, es sólo eso.

—¿Estas seguro? Si es algo importante dímelo…

—Siempre insistes, ¿verdad?—sabiendo que no dejaría ir el asunto dijo: —Hizo algunos comentarios irrespetuosos hacia ti.

—¿Hacía mi?—pregunto sorprendida. —¿Qué dijo?

—No quiero repetirlo, pero mejor ve a Melissa en la universidad, como viste su situación familiar es muy estricta, mejor evítale problemas.

—No volveré, a menos que ella me lo pida.

—Eso esta bien—dijo Nico—¿Vamos a casa?

Cam asintió.

No hablaron mucho en el camino, cuando llegaron a casa su mamá ya estaba en su habitación, Cam fue a verla.

Tras ver y hablar un poco con su mamá, se puso su pijama y fue a la habitación de Nico.

Lo encontró acostó en la cama, tenia los ojos cerrados y ni siquiera los abrió cuando ella entro.

Cam se acercó y se acostó a su lado, abrazándolo, Nico hizo lo mismo y por varios minutos no hicieron ni dijeron nada más.

Se sentía tan bien estar así, cuando estaba con Nico no hacía falta hablar.

—Perdóname—susurro Cam contra su pecho donde descansaba su cabeza. —Entiendo porque me dijiste todo eso y sé que quien debería haberse enojado eres tú y no yo. No reaccioné bien, creo que siempre termino demostrándote cuán inmadura soy, no sé como puedes amarme, tú eres tan perfecto…

—Shh—susurró Nico—Nadie es perfecto, y no tengo nada que perdonarte.

—Te voy a extrañar mucho—le dijo Cam. —¿Tendrás tiempo de llamarme?

—Siempre tendré tiempo para ti—respondió Nico—Siempre; ¿y tú querrás que te llamé?

Cam levantó la cabeza para encontrar su mirada. —Todas los días, todas las veces que sea posible.

—Entonces así será, pero si en algún momento no quieres que llame por que necesitas sentirte libre para estar con…

Cam puso su dedo índice sobre sus labios. —Voy a querer que me llames siempre.

Se besaron y acariciaron un poco, pero no hicieron el amor, Cam quería, realmente quería pero Nico no dio ninguna señal de iniciarlo y Cam entendió que si lo hacían lo que venía sería más difícil para él.

Y a pesar de que ella en verdad quería--ya que hacía tiempo que no lo hacían, cuando fueron a la playa había sido la última vez--Cam respeto las necesidades de Nico y no propicio nada.

Al día siguiente no fue a la escuela, decidió pasar todo el día con él, por la noche se despidieron en su casa porque Nico no quería que regresara desde el aeropuerto sola. Y Augusto no podría traerla porque él también iba.

La despedida no fue fácil, pero Nico tenía que ir y Cam no podía pedirle que no lo hiciera.

Cam no tenía idea de que pasaría mientras él no estuviera, lo que tenía muy claro es que dejarlo ir no era tarea fácil.

Capítulo 4 de Indecisión

Cam había sugerido ir a un lugar donde pudieran estar solos, en casa era imposible porque su madre estaba allí, y había tantas cosas por hablar que realmente necesitaban estar solos, sin ninguna interrupción.

Como Augusto no estaría en casa, según información de Nico, decidieron ir allí.

Aunque a Cam no le parecía la situación más propicia para hablar sobre todos sus asuntos, Nico la termino convenciendo de meterse a la piscina, como no iba prevenida y pareciéndole demasiado atrevido entrar desnuda, se metió en ropa interior, al igual que Nico. No querían correr el riesgo de que Augusto llegara antes de lo previsto y los encontrara en tal situación.

Después de nadar un poco y disfrutar del agua terminaron en una de las esquinas de la piscina, Cam sentada en el borde y Nico parado frente a ella, entre sus piernas con sus manos sobre su cintura, todo esto trajo recuerdos a Cam de la primera vez que habían estado en esa piscina y todo lo que había pasado; y estar en esa posición con Nico no ayudaba al propósito de esta noche, aclararlo todo.

—Pues bien, hablemos—dijo Nico.

Cam lo observo unos segundos antes de responder, se veía tan tentador con el cabello mojado y era imposible no seguir el rumbo de las gotitas que le escurrían del cabello y terminaban deslizándose sobre su torso desnudo. ¿Cómo podía concentrarse en hablar viéndolo así?

—No es fácil hablar cuando te tengo así.

Nico sonrió y le acarició la espalda. —¿Y me lo dices a mi?

Cam le devolvió la sonrisa e inclinándose le dio un ligero beso en los labios. —Esta bien, enfoquémonos—dijo enderezándose. —Desde que te fuiste cuando supiste lo que paso con Alejandro, no hemos hablado como deberíamos, por dos semanas no supe de ti y pensé que no querías saber nada de mí…—Nico iba a empezar a hablar pero Cam lo detuvo—espera, déjame terminar, esas dos semanas fueron terribles, me dolió muchísimo y ahora se que no fue tu culpa, pero todos esos días fueron insoportables e interminables, el día que el padre de Axel me secuestro estuve con Axel antes—Cam se mordió el labio y respiro profundamente—tampoco lo había visto desde la noche que te fuiste, pero ese día fue a buscarme a la universidad y paso algo entre nosotros…

—Ya lo sé. No tenemos que hablar de eso, Axel me lo contó todo cuando me busco para rescatarte, sé como ocurrieron las cosas, no necesito que me expliques nada.

—Pero Nico…

—Déjame hablar a mi, por favor—cuando Cam asintió, Nico prosiguió—cuando me fui no fue fácil para mi, verte como te vi y dejarte así me destrozo pero estaba celoso, enojado y necesitaba espacio para tranquilizarme, para luchar contra esos instintos que se revolvían dentro de mí, no podía darme el lujo de perder el control, soy un vampiro, para mi perder el control puede llevarme a hacer cosas con consecuencias fatales y no puedo permitírmelo. Esas dos semanas que estuve encerrado pude pensar y pensar y termine entendiendo lo del beso con Alejandro, sé que no significo nada, que para ti fue un beso de amigos y ya, y que tampoco debió ser fácil para ti acceder, y entenderlo no lo fue para mi pero termine entendiéndolo e incluso comprendí que no estaba enojado por eso, ni celoso de Alejandro, estaba celoso de Axel, porque él te hizo dudar de convertirte, eso me llego Cam, porque muchas veces trate de hacerte ver que no era lo mejor para ti pero siempre te opusiste y te mostraste tan segura que termine cediendo, aceptando que era tu decisión y no la mía y que tenia que respetarla, pero entonces viene él y logra que te lo pienses… no lo pude soportar.

—Lo siento—Cam susurró, escuchar a Nico la había conmovido y no pudo contener algunas lágrimas obstinadas.

Nico enjugó sus lágrimas con su pulgar. —Cuando Axel me contó todo lo que pasó me di cuenta que esta enamorado de ti.

Cam ensanchó los ojos ante la afirmación, ella lo sabía, pero no imagino que Nico lo supiera.

—Lo único que tenemos que resolver es eso, es lo único que esta interviniendo en esta relación, yo te amo Cam pero…

—Yo tamb…

—Shh espera, Cam te amo como nunca creí posible amar, y quiero estar contigo, sea unos años o por la inmortalidad, esa es solamente decisión tuya y no voy a intervenir ni en pro ni en contra, tendrá que ser algo que tu decidas y sea cual sea esa decisión yo la respetare. Pero te quiero completa.

—¿Qué… qué quieres decir?—preguntó Cam desconcertada.

—¿Cómo te afecta que Axel este enamorado de ti? ¿Por qué logro que dudaras?

Cam miro a los ojos a Nico por varios segundos, trataba de encontrar respuestas a sus preguntas pero estas se negaban a ser encontradas. Pero al mirarse el uno al otro de esa manera parecía como si las palabras no fueran necesarias, era como si a través de sus miradas las respuestas y preguntas fueran y vinieran, un hilo invisible viajando del uno al otro, dos almas al descubierto comunicándose en un universo paralelo a las palabras, en un universo donde los sentimientos emergen mostrando la realidad que a veces es tan difícil aceptarse a uno mismo.

Nico parpadeo y Cam no fue ajena a las lágrimas que él estaba conteniendo.

—Nico…

Él no dijo nada, solamente se inclino y la besó.

Sus labios se deslizaban sobre los suyos con absoluta reverencia, con un amor tan palpable que era difícil de expresar.

Cam saboreo las lágrimas de Nico, degustar el sabor salado de ellas trajo las suyas a la vida, y en ese beso las lágrimas de ambos se mezclaron y aun cuando al final desaparecerían, era como si al mezclarse dos partes esenciales de ambos lo hicieron, permanentemente.

—Te amo—murmuro Nico contra sus labios.

—Nico…

Alejándose pero sosteniendo su rostro entre sus manos, Nico la miro y Cam supo que él había visto demasiadas cosas dentro de ella, por esa conexión entre ambos al mirarse--o por la habilidad que ella le había transmitido, no tenia idea--pero sabía con total certeza que Nico sabía mejor que ella misma lo que estaba pasando en su interior y eso la asusto, la asusto mucho. La idea de permitirse sentir lo que él sentía paso por su cabeza pero inmediatamente la desecho, no la necesitaba, sabía lo que venia.

—¿Qué sientes por Axel?

—No lo se—respondió sinceramente. —No lo amo, pero la última vez que me beso sentí algo—entre lágrimas siguió—ni siquiera se si es debido a que absorbí sus sentimientos, se que no se compara a lo que siento por ti, pero esta allí…—sollozó—y me hace sentir culpable, como si estuviera engañándote. No se si es cariño, amistad, atracción, no lo se—respiro y tras pensar un poco continuó: —sabes que antes de ti no hubo nadie más, no se mucho de sentimientos y definitivamente no tengo experiencia en el amor, pero sentir algo por él, aunque sea mínimo me asusta, me hace sentir mal, empaña nuestro amor.

—Tienes razón. —respondió escuetamente Nico.

Cam boqueó ante su afirmación. Su cuerpo tembló, su boca se sintió seca y el temor se arremolino en su estomago.

—¿Me odias?

Nico se rió, aunque fuera una risa hueca, sin humor. —De ninguna manera, te amo Cam, y el que puedas estar experimentando algún sentimiento por Axel no cambiara eso. No tengo reclamos tampoco, eres tan joven, y como bien dices yo fui el primero, sino me hubiera entrometido en tu vida, hubiera sido otro el primero y después seguramente habría otros, hubieras tenido una vida de experiencias, como debe ser, aprenderías la diferencia entre todos los sentimientos románticos que puedes sentir, pero llegue yo, una intromisión en tu vida que la cambio para siempre, he vivido mucho y se que lo que hay entre nosotros—enfatizo señalando con su mano del uno al otro—es trascendental, se que me amas Cam, lo veo dentro de ti, esta conexión es inigualable, pero tienes que ver por ti misma la diferencia entre lo que sientes por mi y lo que puedes sentir por otro, sea Axel o alguien más. Tienes 18 años, no puedo pedirte amor eterno, seria egoísta si te negara el derecho a vivir.

—Pero Nico, se perfectamente que lo que siento por ti no se asemeja a lo que siento por Axel, no se puede comparar.

—Pero te perturba, sientes que empaña nuestro amor y es verdad, por pequeño que sea tienes que resolverlo, te quiero completa, sólo mía Cam, sin dudas, sin la mínima duda.

—¿Y cómo lo resuelvo?—preguntó Cam sintiéndose impotente.

—Viviéndolo.

—¿Qué… qué quieres decir?

—Que te permitas sentir lo que sientes por Axel y que veas a donde te lleva.

Cam empujo a Nico y se paro frente a él. —¡Estás loco!—exclamó empujándolo de nuevo. —¿Me estas… me… me… estas arrojando a los brazos de Axel?

—¡Por Dios!—Nico exclamó—pues si es a donde lo que sientes por él te lleva, entonces si ¡maldita sea!—culminó gritando.

—¿Cómo puedes decirme eso?—preguntó indignada.

—Porque quiero que experimentes ese algo que se inmiscuye entre nosotros, quiero que lo resuelvas, que descubras qué es ese algo y si puede llegar a más o se desvanecerá.

—No puedo creer que me estés diciendo esto, es decir que si en ese experimentar me acuesto con Axel, ¿vas a estar perfectamente de acuerdo con ello?

Nico la miró airado y le dio un puñetazo al borde de la piscina, que se quebró por el impacto.

—Lo siento, no quise decir eso—Cam se disculpó y extendió su mano para revisar el puño de Nico, sosteniéndolo lo examinó pero estaba intacto.

—Estoy bien—respondió retirando su mano. Cam lo vio inhalando profundamente. —Mira Cam, soy el más estúpido y loco por lo que te voy a decir, pero lo diré de todos modos, tengo que salir de la ciudad, ha habido más asesinatos como por el que estuve encerrado, un grupo de compañeros del movimiento y yo vamos a seguir el rastro de esos asesinatos, tenemos que atrapar al responsable—volvió a respirar profundamente—no quiero saber lo que pase en el tiempo que este fuera, lo que pase será tuyo y nada más, no preguntaré, lo único que quiero es que definas tus sentimientos, que veas la diferencia entre lo que tenemos y lo que puedes tener con él, sólo eso.

Cam estalló en llanto. —Te vas y me dejas con carta abierta para hacer lo que se me venga en gana, sin tener que darte explicaciones cuando vuelvas, oh Nico, mil gracias, que considerado de tu parte, seguramente Axel estará muy agradecido—dijo irónicamente.

—Me importa un bledo lo que Axel piense, esto lo hago por ti, por nosotros.

—Eres un estúpido, ¿cómo puedes instarme a experimentar lo que siento por Axel? Si me amas como dices, ¿cómo puedes siquiera concebir la idea de que mientras no estés haga lo que quiera con Axel?

—¿Crees que es fácil para mi?—gritó Nico. —¿Piensas que no me matara pensar que en determinado momento podrías estar besándote con él, o que este tocándote?

—¿Entonces por qué maldita sea me das permiso para hacerlo?

—Porque quiero que seas enteramente mía, sólo mía, porque te amo tanto que quiero que vivas un poco de lo que te quite cuando aparecí en tu vida, porque quiero que si decides convertirte nunca llegues a arrepentirte, prefiero volverme loco imaginando lo que puede estar pasando en mi ausencia a cargar con la culpa de lo que te robe toda mi interminable vida.

Cam se limpió las lágrimas. —Es que no me has robado nada, el que estés en mi vida es maravilloso, nunca podría reclamarte eso, nunca.

—Pero ese algo por Axel esta en ti, así que averigua lo que es y quítalo de en medio para que podamos estar juntos sin nada que empañe nuestra amor.

Cam se dio la vuelta, y dándole la espalda preguntó. —¿Y si me enamoro de él? ¿Si decido que quiero estar con él? ¿Qué vas a hacer? ¿Darnos tu bendición?

—No se que haría, porque me creas o no, sé que eso no va a pasar.

—Estúpido engreído, ¿me arrojas en los brazos de otro con la seguridad de que no me enamorare de él? Vaya lógica, vivir tantos años te ha frito el cerebro.

—Cam…

Ella lo detuvo con su mano. —No digas más. ¿Cuándo te vas?

—Mañana por la noche.

—¿Cuándo vuelves?

—No tengo idea, a menos que ese asesino vuelva a la ciudad hasta que lo atrapemos.

—Pues bien, disfruta tu cacería, yo disfrutare de mi libertad.—y con esas palabras Cam salió de la piscina, entró a la casa, se vistió rápidamente-- sin importarle que su ropa interior estuviera empapada. Luego salió de la casa sin volver a ver a Nico.